¿Por qué aparecen humedades por condensación en tus ventanas?

Las humedades por condensación son uno de los problemas más comunes en las viviendas durante el otoño e invierno. Este tipo de humedad aparece cuando el vapor de agua presente en el aire interior entra en contacto con una superficie fría, como los cristales de las ventanas. El resultado: gotas de agua que se acumulan, empañan los cristales y pueden terminar generando moho.

La condensación suele producirse por una combinación de factores: una mala ventilación, una diferencia térmica acusada entre el interior y el exterior, y un aislamiento insuficiente. Si no se actúa, puede afectar a los marcos de las ventanas, a las paredes cercanas, e incluso dañar el mobiliario.

¿Cómo evitar la condensación en casa?

Evitar las humedades por condensación es clave para preservar la salud del hogar. Aquí te dejamos algunos consejos prácticos:

• Ventilación diaria: Abre las ventanas unos minutos cada mañana, especialmente en baños, cocinas y dormitorios.
• Uso de deshumidificadores: Estos aparatos ayudan a mantener un nivel de humedad adecuado en ambientes cerrados.
• Revisión de juntas y marcos: Las juntas mal selladas permiten filtraciones que favorecen la humedad.
• Mejorar el aislamiento: Instalar ventanas con doble o triple acristalamiento reduce las superficies frías que causan condensación.

También puedes optar por soluciones más técnicas, como sistemas de ventilación forzada (VMC) o tratamientos antihumedad profesionales para evitar la aparición de moho.